SÁBADO

17 DE ENERO

2004

COMARCA

 

VILADECAVALLS
   

Vecinos y ecologistas tildan

de ilegal la antena de Can Corbera

 

Recuerdan que este repetidor debía haber sido "legalizado" antes de finales de 2002

Las antenas de telefonía móvil se han convertido en un enquistado problema para el gobierno de Viladecavalls. Tras la polémica por el repetidor de Can Trias, ahora asociaciones de vecinos y ecologistas denuncian la ilegalidad de la instalación existente hace años en Can Corbera.

 

Javier Montoro~

El Col·lectiu Naturalista Viladecavalls Verd (Convive) y las asociaciones vecinales de Can Pepet, La Planassa, Les Carenes de Can Turu, Sant Miquel de Guanteres, Viladecavalls Centre y Can Corbera han denunciado la situación «ilegal» en la que se encuentra la antena de telefonía móvil ubicada en este último barrio, concretamente en el Camí del Pla del Castany, vigente desde 1994. Atendiendo a esta situación «irregular », los denunciantes piden el desmantelamiento de la citada instalación. Tal petición se produce después de que el equipo de gobierno, en comisión de gobierno, haya dado el vistobueno a la implantación, en el mismo mástil, de un repetidor de Amena, que se uniría al ya existente de Vodafone.

El argumento para justificar la ilegalidad de esta antena se sustenta en el hecho de que la legislación vigente sobre telefonía móvil, según ha explicado el presidente de CONVIVE, Juan Luis del Campo, «deja muy claro que Jas antenas existentes antes de la entrada en vigor de la nueva ley tenían hasta finales de 2002 para normalizar su situación y adaptarse a los preceptos aprobados; en el caso que nos ocupa, se trata de una antena instalada a mediados de los 90 que, al día de hoy, no ha sido legalizada».

Del Campo también remarca que el Ayuntamiento no es quién tiene la competencia para legalizar esta antena, «pues se ubica en suelo rústico, y por tanto la competencia es de la Generalitat».

Estos argumentos han sido puestos en conocimiento del equipo de gobierno de Viladecavalls y del propio departamento de Medi Ambient de la Generalitat.

También ha recibido el alcalde, Fèlix Farré, una carta de las ásociaciones de vecinos citadas anteriormente en la que se le pide que esta antena «sea desmantelada, derribada o sellada». Además, se le demanda información que confirme que «no existe ningún riesgo para la salud de los vecinos que viven cerca de los campos electromagnéticos emitidos por estas antenas».

Las entidades vecinales recuerdan que en enero de 2003 se iniciaron las obras de am· pliación de la antena, pese a que la empresa carecía de permiso.

RESPUESTA MUNICIPAL

El alcalde de Viladecavalls, Fèlix Farré, se ha mostrado sorprendido por estas críticas, «ya que lo único que hemos hecho ha sido, siguiendo lo que marca la ley, obligar a que dos empresas de telefonía compartan el mismo mástil de antena; un mástil que, por cierto, ya hace años que estaba puesto». Además, señala Farré, la legalidad de esta instalación es competencia de la Generalitat, al ubicarse en terreno rústico y no urbano. Sin embargo, por la ubicación de la antena, el alcalde de Viladecavalls se muestra convencido de que ésta «cumple con todos los requisitos legales, al igual que cuando fue instalada; lo que ocurre es que cuando se montó aún no había entrado en vigor la nueva ley, si bien entonces se ajustó a lo que marcaba la legislación imperante».